Irungo Harrera Sarea, la Red de Acogida de Irun, ha atendido a más de 3.000 personas en 2019
Francia sigue con las expulsiones ilegales. El 12 de enero, IHS atendió a 12 personas expulsadas en un solo día
Irungo Harrera Sarea ha atendido a más de 3.000 personas en 2019 a través de sus diferentes grupos de trabajo. Mayoritariamente hombres (82%), mujeres (10%) y criaturas y menores (8%) y procedentes mayoritariamente de Guinea Conakry, Costa de Marfil y Malí hasta un total de 18 países de África y Asia. Los grupos de trabajo de ropero, acogida e información y gautxori han continuado así con su labor diaria y sostenida este pasado 2019, cubriendo las carencias de una acogida digna e integral.

15-M Ronda. En pocas palabras.- Más de 70 millones de personas en el mundo han perdido su hogar y sus raíces a causa de la guerra y la violencia (ACNUR). En la última década esta cifra ha sufrido un aumento muy notable, pasando de 43,3 millones de desplazados forzosos en 2009 a 70,8 millones en 2018. Huyen del conflicto, la violencia, la persecución y la violación de derechos humanos. Las personas que se ven en la situación de tener que abandonar su hogar lo hacen porque temen por su vida, nadie elige ser refugiado. Algunas llevan viviendo más de 50 años en los campos de refugiados, los más jóvenes ya han nacido allí y constituyen la tercera generación.
Como comentábamos en la crónica anterior, llegamos a Alhorn, a eso de las nueve y media de la mañana. El lugar ya nos resulto conocido, era una de las distintas visitas que hicimos años atrás con Guido. Se trata de los locales de una organización similar a la Cáritas católica, llamada Diakonise que sería la similar de la Iglesia Evangelista de Alemania. En sus locales durante todas las semanas, las compañeras de ALSO van a realizar diferentes atenciones, sobre todo consultas. Digamos que es el lugar, uno de ellos, de los puntos de información móviles de ALSO en la región.
ARAINFO
Patricia Simón.-
EN POCAS PALABRAS. Un paseo por el mundo. 15-M RONDA.- Bajo el frío e insensible enunciado de MENAS, se esconden las historias de niñas y niños que se convierten en mujeres y hombres demasiado rápido. Llegan a España persiguiendo un sueño, se ven envueltos en una burocracia atroz que les engulle, en algunos casos, y cuando cumplen los temidos 18 años pasan a caminar por la difícil cuerda de la supervivencia.





Erletxea.- No ha pasado un mes y la situación no afloja sino que se intensifica. Es difícil conocer la cifra exacta de las personas migrantes que esperan en Irun dar el salto y cruzar el río Bidasoa con destino a otros países del norte de Europa. La solidaridad continua así como la presión política a las instituciones para que en soluciones dignas a estas personas.