15-M Ronda. En pocas palabras.- Durante la Presidencia Española del Consejo de la Unión Europea, organizaciones, plataformas y coordinadoras del Estado español nos movilizaremos los días 5 y 6 de octubre coincidiendo con la celebración de la próxima Cumbre de la UE en Granada, que servirán a los intereses del poder financiero y las grandes empresas que dominan la "Unión Europea", en detrimento de las necesidades del pueblo. Se pretende privatizar la sanidad, la enseñanza y el sistema público de pensiones, mientras se aumenta la explotación de la población trabajadora, reduciendo salarios y encareciendo productos y servicios.

Por ello, estamos organizando una Cumbre Social paralela, con el objetivo de aprovechar la presencia del gran número de medios desplegados e intentar hacer visible otra idea de lo que debiera ser la Unión Europea, sustituyendo en el centro de su objetivo el beneficio del capital, por los derechos de la ciudadanía. ¡Sí se puede!

Según un comunicado de la COESPE, la agenda neoliberal en Europa que intentan implantar los poderes financieros (fondos buitres, grandes corporaciones bancarias, y aseguradoras), descubrió hace tiempo la dificultad que entrañaba hacerlo país por país por las contestaciones populares (como el ejemplo actual en Francia), por lo que dirigió sus esfuerzos hacia el control de las instituciones de la Unión Europea.

Desde estas instituciones europeas y con el dinero de los impuestos de la ciudadanía europea, establecen un chantaje continuado sobre los gobiernos nacionales, en la imposición de medidas de privatización de los servicios públicos en beneficio de esos actores, y de leyes que protegen sus intereses por encima del bien común y cuya consecuencia es el desmontaje, sin prisa, pero sin pausa, del Estado del Bienestar y la transferencia del dinero público a bolsillos privados.

Además, del espíritu de unión y entendimiento que debería tener la Unión Europea, apostando por la diplomacia y la negociación (si es que algún día existió), lo que queda patente en la reciente aprobación es el envío de otros 20.000 millones de euros a Ucrania a través del hipócritamente llamado “Fondo Europeo para la Paz”.

A la «Cumbre de la Alhambra», el 6 de octubre, acudirán 44 jefes de estado, y para hacerles llega el mensaje de que otros modelos sociales, políticos, económicos, ecológicos y culturales son posibles, durante dos semanas llenaremos la ciudad de actividades y movilizaciones.

Así, la Central General de Trabajadores Confederal hace un llamamiento para reivindicar:

• Una transición energética justa con financiación pública responsable.
• Una reindustrialización verde decolonial y respetando los límites biofísicos del planeta.
• Un sistema de movilidad accesible y sostenible basado en un transporte público.
• Un frenar la Agricultura 4.0, basada en un proceso de digitalización y concentración de la cadena agroalimentaria que sólo beneficia a las grandes corporaciones, y avanzar en la soberanía alimentaria.
• No más muertes en la frontera Sur. ¡Regularización YA!
• Una justicia ecosocial y ecofeminista, blindando los servicios públicos y los presupuestos sociales y verdes, y un reparto justo de la riqueza.
• Una defensa de la juventud y una transformación hacia una educación ecosocial.
• Una descolonización de las relaciones exteriores de la Unión Europea.
• Un cambio de gastos militares para fines sociales.
  
  

Por otro lado, es alarmante las políticas de seguridad de la Unión Europea que, lejos de proporcionar la verdadera seguridad de las personas (salud, vivienda, tránsito seguro para las personas migrantes, condiciones de vida dignas) se centra en el cierre de fronteras, la militarización y el control social.

La política exterior, basada en garantizar el expolio por parte de las empresas europeas de países empobrecidos con grandes recursos naturales, cierran las fronteras aun a costa de vidas humanas en el Mediterráneo y pactan con terceros países el control de los flujos migratorios.

El peso del lobby de la industria armamentística, que acapara y parasita recursos que los países de la Unión Europea deberían dedicar a fines sociales.

¡Nos vemos en las calles!

¡La lucha es el único camino!