El largo silencio y la pasividad Institucional hecha a los vecinos y vecinas del Barrio. Esta es la dura realidad que viven desde hace tiempo un buen grupo de familias y personas del barrio de Buenos Aires.
Sabemos que el problema del barrio no se va a solucionar con poner orden en algunos bloques de viviendas, pero lo vemos necesario e imprescindible. Lo hemos visto desde hace muchos años y así lo hemos denunciado y reivindicado; y solamente, porque ha causado y continúa causando mucho sufrimiento. Y ante esto, las Instituciones, normalmente, han callado y consentido.
Los vecinos y vecinas de buena voluntad hemos hablado, hemos reivindicado, hemos visibilizado de manera reiterada los problemas, y, por supuesto hemos aportado soluciones de todo tipo. Pero, las Instituciones, públicas y privadas, en general, han callado y se han escondido.