San Luis. Seguimos reivindicando la renta básica como eje contra la desigualdad
El martes nos fuimos de casa de Walter para instalarnos en el departamento del ADU, el cual está más céntrico y nos permite bastante más independencia a la hora de movernos.
Por la tarde, vinieron Alejandro y Daniel a compartir con nosotras algunas cositas que habían estado pensando últimamente. Alejandro trabaja para el Ayuntamiento de San Luis, concretamente en la secretaría de la mujer “ni una menos”. En ese marco, Alejandro, junto a otres compañeres, están trabajando en la idea de una especie de renta básica universal.

San Luis nos vuelve a regala otro día de sol y buen tiempo., como dice una canción que algunas recodaréis, como es habitual a esta hora es el momento de conectar con el otro lado del charco y entre los cafés de una y la manzanilla de la otra vamos perfilando el día.
Dentro de las actividades de nuestras compas por Argentina destacamos este taller que tuvo lugar ayer en Villa Mercedes, San Luis. A las espera de la crónica de dicho taller ahí os dejamos la información.
Aquí os dejamos la noticia de la grave enfermedad que sufre nuestra compa Argentina, Pamela, con la que pudimos compartir en el último viaje por esas tierras de las gentes baladrinas. Desde aquí todo nuestro apoyo y nuestro abrazo más cariñoso y cálido. #TodosConPamela.
Los últimos días en S. Luis, sin Ali ya, los repartimos entre varios lugares, por un lado el sano y ventoso aire en Villa Lacra, que a los pies de la sierra Comechingones, nos dio un día de paseo y descanso dominical, paseamos, comimos, charlamos e incluso conocimos las danzas de la zona. El lunes marchamos a unos 20 km de allí, a la localidad de Concaran donde nos esperaban gentes (mujeres en mayoría) que han constituido una cooperativa textil, tras la toma u ocupación de la misma. Llegamos, acompañadas de Ale abogada (y jueza de paz en Villa Lacra) que las asesora y ayuda en todo el proceso, y Luis de la Casita Cultural.
Estamos en San Luis, una ciudad mediana (350.000 habitantes), gobernada durante 3 décadas por una familia oligarca en la que dos hermanos se han ido alternando el poder y haciendo su feudo particular del territorio, pero no exento de focos de lucha y resistencia que vamos a ir conociendo a lo corto de nuestra estancia aquí. La sierra, a lo lejos, nos anuncian otros paisajes hermosos que rompen con la Pampa, la llanura y el monocultivo envenenado. Gabriel y Luis nos reciben con la generosidad y compañerismo al que nos estamos gratamente habituando. En la mañana hemos aprovechado para estirar un poco las piernas, actualizar las crónicas (este ritmo y la falta de internet nos impide llevarlas al día, sabemos que lo comprendéis), poner en orden los libros y hasta echar una mano en el huerto de Luis.
Tras cuatro horas de colectivo, llegamos a San Luis, procedentes de Mendoza, perdón cuatro debían ser, pero se estropeo el colectivo y quedamos tiradas una horita en la carretera. Así que tuvimos una experiencia nueva: tiradas en la carretera.