Ekologistas Martxan.- Iberdrola entró en Brasil hace casi dos décadas, haciéndose con empresas de distribución y producción eléctrica. La producción en ese país es muy rentable por proceder principalmente de centrales hidroeléctrica, muy barata pues no precisa combustibles. Así construyó distintos embalses y participa en consorcios en la construcción de algunos de los mayores como Belo Monte, Baixo Iguaçu, Teles Pires o el ahora suspendido Tapajós. Si bien estas suponen un desastre en materia medioambiental, también lo son a nivel humano, con un alto número de personas y comunidades desplazadas y con negligencias en su reasentamiento e indemnización. Por ello las movilizaciones se suceden, siendo las últimas hace escasos días tanto en Belo Monte como Baixo Iguaçu.